El Perú es un país marítimo geograficamente privilegiado debido a que el fenómeno de afloramiento de masas de agua transporta materia orgánica del fondo hacia la superficie, de esta manera proporciona alimento a la cadena alimenticia y regula la temperatura. Estas condiciones ofrecen un ecosistema altamente productivo; este ecosistema es denominado Gran Ecosistema Marino de la Corriente de Humboldt (GEMCH). Sin embargo, el cambio climático genera un impacto negativo global en los aspectos económico, social y de sostenibilidad. Al respecto, en el presente artículo se analizará de qué forma el cambio climático impacta en el GEMCH, las consecuencias hacia el año 2050, las acciones y los planes establecidos para alzanzar la sostenibilidad.

El Gran Ecosistema Marino de la Corriente de Humboldt (GEMCH) es uno de los ecosistemas marinos más productivos del mundo. Las capturas pesqueras en el ecosistema de Humboldt representan el 11% del total mundial. Su alta productividad se debe principalmente al fenómeno del afloramiento. Sin embargo, el cambio climático (CC) lo está afectando negativamente. En ese sentido, este documento discutirá cómo las actividades humanas ponen en peligro el ecosistema de la corriente de Humboldt. Con este propósito, primero se describe el GEMCH y el conjunto de actividades humanas que afectan su medio marino. En segundo lugar, el impacto y las consecuencias en los recursos del ecosistema en un escenario hacia 2050. En tercer lugar, las intervenciones y soluciones sociales que podrían contribuir al futuro sostenible del GEMCH. Finalmente, se presentará una conclusión y propuestas de acciones que impidan el impacto negativo de las actividades humanas en el GEMCH.

El ecosistema de la corriente de Humboldt se ubica en el Pacífico suroeste, desde el norte de Chile hasta la frontera entre el Perú y Ecuador. La principal característica de este ecosistema son las aguas de baja temperatura debido al proceso de afloramiento que transporta una masa de agua fría desde las profundidades. Esta gran masa de agua traslada plancton a la superficie, que es de gran utilidad para alimentar a otras especies. Estas circunstancias hacen a las aguas de Humboldt las más frías del océano Pacífico, ya que su temperatura es de 14 °C. En cambio, las temperaturas en otras zonas del océano Pacífico rondan los 24 °C. Por lo tanto, la temperatura promedio del sistema de corrientes de Humboldt es alrededor de 10 °C más baja3. Como resultado de las condiciones favorables y según el informe anual sobre la pesca mundial de la FAO4, el Perú y Chile se ubican históricamente entre los 10 primeros países pesqueros a nivel mundial según sus capturas. Sin embargo, la alta productividad biológica se encuentra en riesgo por las diversas actividades humanas realizadas a través de los años.

El impacto de las actividades humanas en el GEMCH se refleja con la presencia de altas concentraciones de clorofila y productividad potencial de más de 3 gcm² por día en la región costera5. El CC propiciado por la humanidad está amenazando su alta productividad. En este contexto, el Perú y Chile son los países más vulnerables por los efectos negativos causados por la acción humana. Según Gutiérrez et al. , el GEMCH es sensible al CC, lo cual se refleja en cinco consecuencias significativas: acidificación del océano, calentamiento del océano, impacto en el viento, impacto en las corrientes y frecuencia de eventos de El Niño. En la tabla 1 se puede analizar lo propuesto por Gutiérrez.

De acuerdo con la tabla 1, se puede determinar que un océano saludable es muy importante para la sostenibilidad de las fuentes de recursos alimenticios. En contraste, la humanidad no ha sabido retribuir al océano su gran aporte a la vida, lo que ocasiona las consecuencias significativas detalladas en la tabla 1, las cuales se relacionan directamente con el CC.

De la misma manera, existen otras acciones extremadamente negativas para la sostenibilidad de los ecosistemas y los beneficios que nos brindan, como la contaminación de los océanos por basuras, principalmente plásticos provenientes de las ciudades costeras, y la pesca ilegal no declarada y no reglamentada (pesca INDNR).

Según proyecciones oficiales, la temperatura en el GEMCH aumentará a casi 22°C en 2050. Esta situación afecta la característica más importante del mar peruano, que es “menor temperatura-alta productividad”. Actualmente, la temperatura más baja en la superficie es de 14 ºC, y la media debería rondar los 20 ºC14. Cabe señalar que la zona costera es importante para la reproducción de los peces, por lo que su promedio fluctúa entre 16 ºC y 18 ºC. Otra consecuencia del CC es el aumento del nivel del mar. Efectivamente, la tasa media mundial de aumento del nivel del mar fue de 5 mm por año.

Además, un informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático explica que para 2065 el aumento promedio del nivel del mar será de 24 cm a 30 cm16. De igual forma, la Marina de Guerra del Perú concluyó que el aumento del nivel del mar es de 2,9 mm por año y el escenario en 2050 aumentará 8,7 cm más que el nivel actual. Asimismo, el sistema de afloramiento peruano, en un escenario futuro a 2050 (sin acciones ni grandes cambios), muestra el aumento de la concentración de CO2. En el peor de los casos, el CO2 aumentaría de 400 ppm en 2020 a 550 ppm en 205017. Por lo tanto, el aumento de temperatura y concentración de CO2 pone en riesgo el ecosistema de la corriente de Humboldt, especialmente para países pesqueros como Chile y el Perú.

Según el proyecto desarrollado entre los gobiernos de Chile y el Perú, apoyado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) denominado “Hacia un manejo con enfoque ecosistémico del GEMCH”, el flujo de bienes y servicios que generan todas las actividades en el ecosistema de la corriente de Humboldt ascienden a 19 459 millones de dólares americanos. Al Perú le corresponde el 42% del total.

El GEMCH le ofrece a Chile y al Perú una fuente increíble de recursos marinos. Estos países dependen económicamente del sector pesquero en particular, debido a la anchoveta. Salvatteci et al. explican que durante el siglo XX existe una mayor productividad marina de anchoveta, casi ocho veces superior a los últimos 500 años.

Sin embargo, un océano que se calienta no es ideal para esta especie, porque una mayor estratificación térmica y reducción de oxígeno en las aguas superficiales podrían reducir la productividad del mar. El experto investigador peruano Gutiérrez remarca que en el escenario de 2050, “las especies más afectadas son todas aquellas que habitan en zonas costeras, principalmente aquellas que se reproducen en las desembocaduras de los ríos”. Asimismo, afirmó que “otras de las causas que afecta al océano peruano es la contaminación llevada al mar por los ríos y la desglaciación que ya es evidente en el Perú”. Cabe señalar que el calentamiento del mar puede representar un cambio en la distribución de las especies hacia el sur de sus áreas de distribución actuales. Sin embargo, en un escenario optimista, en el que el Estado emprende todas las medidas recomendadas por los expertos, estos impactos pueden ser mínimos.

Las poblaciones de peces del GEMCH dependen directamente de la situación climática que afecta la producción de fitoplancton. Según los modelos globales, para 2050 habrá una disminución moderada de las capturas, para Chile -1,6% y para el Perú 0%, pero para 2095 la situación será dramáticamente peor, porque la reducción será -3% para Chile y -7,6% para el Perú. Con el paso de los años la industria pesquera peruana provocó un incremento demográfico y social en las zonas costeras. Como consecuencia, generó un impacto ecológico y social; por ejemplo, presencia de contaminación y basura marina en áreas costeras. Al mismo tiempo, la sobrepesca está causando un fuerte impacto en GEMCH. Tal es el caso de la pesca en pequeña escala, que está vinculada a la informalidad y la falta de control gubernamental. Bertrand et al.23 recomiendan controles estrictos y sugieren una reducción de la capacidad en la pesca artesanal. Sin embargo, esta decisión podría tener efectos sociales negativos

Se ha argumentado que la sustentabilidad del GEMCH para el escenario de 2050 está en riesgo debido a las acciones humanas. Por ello, ya se han tomado acciones importantes, como el Acuerdo de París sobre cambio climático, en el cual los países decidieron hacer los esfuerzos para reducir el aumento de la temperatura global por debajo de los 2 °C y alcanzar los 1,5 °C.

En este contexto, el ODS 13 (“Acción por el clima”) tiene el objetivo de reforzar la respuesta mundial a la amenaza del CC y apoyar a los países en aspectos financieros y tecnológicos. Sin embargo, el año 2019 ha sido el más caluroso de la historia. Al respecto, es conveniente monitorear y evaluar los resultados sobre estos objetivos a nivel regional y nacional. En ese sentido, la recientemente emitida Política Nacional Marítima del Perú determina como uno de sus objetivos prioritarios “Fortalecer las actividades productivas en el ámbito marítimo, en forma racional y sostenible”. De hecho, la decisión de mejorar la situación aún está en manos humanas; por lo tanto, la sociedad, las organizaciones públicas y privadas deberían trabajar juntas para proteger la sostenibilidad del ecosistema de la corriente de Humboldt; de lo contrario, el resultado será catastrófico para la comunidad mundial.

En términos generales y en concordancia con lo expuesto, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) propone cuatro intervenciones políticas en los océanos para garantizar su sostenibilidad hacia 2050. Las acciones son las siguientes: conservación y restauración de hábitats de manglares, aumento de la producción eólica marina, descarbonización del sector marítimo internacional y aumento de la producción de proteínas oceánicas de origen sostenible (WRI, 2020).

Por otro lado, en el contexto regional, las intervenciones y soluciones sociales que podrían contribuir a un futuro sostenible de GEMCH dependen principalmente de las autoridades gubernamentales. Por ejemplo, Gutiérrez recomienda “instalar plantas de tratamiento de aguas residuales en todos los pueblos ubicados a lo largo de la cuenca de los ríos”. Además, “formalizar y fortalecer el sector pesquero artesanal, que es el más vulnerable y diversificar las actividades económicas actuales de los pescadores artesanales, para incluir el ecoturismo y el procesamiento de vísceras de pescado para producir fertilizantes orgánicos”. De igual forma, promover el uso de fibra de vidrio en lugar de madera, ya que nuestros bosques se ven severamente afectados por la tala ilegal, porque son los bosques los que absorben más CO2 atmosférico.

A niveles nacionales, el Ministerio de la Producción informó que para mejorar los resultados en 2021 el objetivo es formalizar 16 000 pequeñas empresas. Esta autoridad también promoverá la formación y la innovación tecnológica a más de 9400 empresas. Chile presentó una iniciativa de aplicación tecnológica para apoyar la actividad pesquera legal y sustentable, mediante la promoción de la oferta directa de los pescadores al público.